Argentina/21 de Agosto de 2020/Fuente:https://www.lanueva.com

Representantes de gremios docentes consultados por La Nueva. hablaron sobre una de las áreas más afectadas por la pandemia de COVID-19: la educación.

El aislamiento social impuesto por el Gobierno Nacional para frenar la pandemia lleva 154 días. Y durante todo este tiempo docentes de todos los niveles y de todo el país debieron sostener las clases de manera virtual.

Desde los 3 gremios coincidieron en algunos puntos: la falta de acceso a la conectividad, la carga extracurricular en los docentes, los recursos que debieron poner de sus bolsillos y las dificultades para garantizar el aprendizaje.

También coincidieron en el “orgullo” que les genera el compromiso que las y los docentes demuestran desde el 20 de marzo. Sobre todo, al estar “aprendiendo” a la par de los estudiantes esta nueva modalidad de enseñanza.

A continuación, representantes de 3 gremios principales exponen esta situación.

Paula Repetto, del Centro de Educadores Bahienses (CEB)

“Esta situación se sostiene pura y exclusivamente por la vocación, la entregra y las ganas de superarse que cada uno pone de sus hogares. Es muy difícil llegar a todos, se necesita conectividad, se necesitan insumos”.

“El Estado no dio respuestas a todos los docentes ni a todos los alumnos porque en todos los lugares de la provincia las desigualdades se pusieron de manifiesto con más acento que antes. No todos los niños, jóvenes y adolescentes tienen acceso a la conectividad y, por lo tanto, y a pesar de que están los cuadernillos, los procesos de enseñanza y aprendizaje son difíciles de sostener”.

“La pandemia nos ha dado una vuelta y media a todos y a las escuelas aún más. No conocíamos estar en las escuelas sin la presencialidad. Por eso tuvimos que aprender, buscar nuevas herramientas, sentarnos horas y horas frente a la computadora para preparar una clase que tal vez antes lo hacíamos en muchísimo menos tiempo. Y a su vez para los alumnos también se hace más complicado poder acceder a estos aprendizajes y poder preguntar y repreguntar las veces que sean necesarias”.

“Los docentes hacen un esfuerzo increíble. Por eso desde CEB estamos orgullosos de ellos y pedimos encarecidamente que se regule de una vez por todas este teletrabajo porque pasamos a ser docentes las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Por supuesto que lo hacemos por nuestros alumnos y alumnas que se lo merecen. Pero también hay que saber defender nuestros derechos y poner un límite a todo esto”.

“Estamos dispuestos a dar batalla a esta nueva escuela que nos tocó, pero nos estamos disponibles las 24 horas del día los 7 días de la semana. Vamos a seguir insistiendo en que es necesario empezar a planificar la vuelta a clase con todos los protocolos que se tienen que dar desde Provincia y se verán en cada distrito y cada escuela. Y recién ahí veremos la forma efectiva de volver a la escuela porque creemos que es una necesidad, pero una necesidad responsable”

“Por eso una vez más frente a la educación virtual nos sacamos el sombrero y felicitamos la labor que cada uno de los docentes hace desde sus hogares”.

Sergio Gómez, secretario adjunto del Sindicato Argentino de Docentes Particulares (SADOP)

“La situación de pandemia nos atravesó a todos de un día para otro, se dictaminó el aislamiento social preventivo y obligatorio y las y los docentes se encontraron frente a un nuevo paradigma. Y desde el primer día se comprometieron con esta nueva realidad y pusieron todas las herramientas propias (celular, computadoras, internet, etcétera) y el tiempo privado para poder llevar adelante la continuidad pedagógica”.

“Con el paso de los días recibimos de muchas y muchos docentes, inquietudes en referencia a la sobrecarga de trabajo y otras problemáticas que surgieron a partir de realizar la actividad desde la virtualidad y a consecuencia de esto SADOP puso en marcha una encuesta nacional que se realizó en abril, de la cual participaron una gran cantidad de docentes, lo que nos permitió llevar adelante la presentación de propuestas al ámbito de negociación de la Paritaria Nacional Docente”.

“Este acuerdo, firmado en los primeros días de junio, fija pautas para la actividad en el marco de la pandemia que garantiza, entre otras cosas, el derecho a la intimidad, al descanso, a la desconexión y reconoce el trabajo docente en la virtualidad”.

“Desde SADOP hemos reclamado a las cámaras empleadoras a nivel provincial que se pague un plus a las y los docentes para poder hacer frente a esta situación ya que las y los trabajadores han sufrido un gasto extra en sus hogares por el uso de internet y electricidad, y un desgaste de sus propias herramientas de trabajo y en muchos casos una inversión extra para poder comprarlas”.

“El Estado Nacional y hace pocos días también el Estado Provincial han puesto a disposición una serie de programas y ayudas económicas que permite el pago de un porcentaje los salarios en los establecimientos que no tienen subvención provincial para sobrellevar este período excepcional. Uno de los sectores de la docencia más afectado fue el de los jardines maternales, pero hoy existe un compromiso por parte del Gobierno Provincial a través del programa de Protección del Trabajo para incluirlos en el otorgamiento de esta ayuda mejorar su situación”.

Gabriela Delfino, de Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA)

“Los docentes seguimos atravesando la desigualdad que quedó expuesta con esta pandemia. El acceso a la conectividad de alumnos y alumnas ha surgido con fuerza como uno de los problemas a la hora de presentar las actividades en este marco extraordinario. Tener un celular por familia para realizar las tareas de varios hijos e hijas no constituye ‘conectividad’. Tampoco lo es que alumnos y alumnas concurran a una plaza para acceder al wifi gratuito y lograr tener las actividades a realizar. Tampoco lo es que madres y padres, con ese único celular, ronden afuera de las escuelas para acceder a lo mismo”.

“La desigualdad que hemos venido denunciando la afrontan los docentes, con sus propios recursos, y tratan de achicar esa terrible brecha con todos los medios posibles. Lo único que ha brindado el Estado en nuestra ciudad para esta en contingencia son los cuadernillos en papel, que, ahora se pone de manifiesto, aumenta más la diferencia entre alumnos que tienen acceso y quienes no lo tienen”.

“Para hacer frente a esto, los y las docentes se encuentran trabajando el doble de tiempo, con una sobrecarga laboral que implica dar respuesta ante todas estas situaciones. Implica saber que sus alumnos van a conectarse cuándo y cómo pueden, que a los que no se conecten hay que brindarles otras opciones y que todo eso requiere de mucho más tiempo del que se invertiría si estuviéramos en clases normales”.

“Al mismo tiempo, la mayoría tienen que acompañar a sus hijos en la realización de las tareas escolares. A esto hay que sumar que gran cantidad de establecimientos escolares están entregando bolsones de alimentos para paliar la cada vez más cruda situación económica que atraviesan las familias. Y aquí tampoco el Estado ha cuidado a la comunidad educativa (familias, alumnado y docentes), puesto que esta tarea se realiza en escuelas donde el Estado no ha garantizado la higiene, ni los elementos de protección necesarios. Los barbijos los compran los docentes, el alcohol en gel, cuando se consigue, también. Se manipulan paquetes, se arman bolsones, desde la más sentida solidaridad, pero con el mínimo protocolo por la falta de insumos necesarios”.

“Una vez más, ante la usencia de los recursos necesarios, es la docencia la que intenta achicar la brecha de la desigualdad de las y los alumnos y sus familias”.

“El otro punto es la falta de cobertura de los cargos docentes, ya que los actos públicos fueron suspendidos por el ASPO. Luego de 6 meses (donde cientos de alumnos y alumnas no tuvieron docentes, y el resto del personal se estuvo haciendo cargo de la continuidad pedagógica, con la sobregarga de trabajo que esto implica y sin cobrar un peso) se empezarían a producir los actos públicos virtuales. Pero solo para cargos provisionales. Todos aquellos cargos, módulos y horas que requieran de suplentes, no se van a cubrir, como así tampoco todos los niveles y modalidades. Por lo tanto, el ahorro de no haber pagado esos salarios en estos 6 meses, no se volcará a en nombrar todos los y las docentes que faltan”.

Fuente:

www.lanueva.com/nota/2020-8-20-6-30-48-educacion-virtual-extendida-los-docentes-hacen-un-esfuerzo-increible